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platsch platsch!
y lluvió todo el trayecto de vuelta

hay gotas que caen sobre mi y se van a demorar otra vuelta en alcanzar el suelo
esquivaron la gravedad y se devolvieron;
otras cayeron -a mi parecer las más afortunadas (de las que vi)- sobre hojas todavía en sus árboles correspondientes y aún propios
yo también soy afortunada, la falta de sol no me impide escucharlas, tantas y tantas millones de veces, en un solo paso
otras son gotas fugaces, no importa donde caen,
brillan,
como la luna o los meteoritos, gracias a un foco o al roce con la luz,
quedan las gotas que se revientan en el suelo, mientras más grande la explosión mayores son sus probabilidades de ser posa, o riachuelo callejero.
Se introduce en mi registro un sonido nuevo,
:las cascadas de vereda




y NO HE ESTORNUDADO SIQUIERA
no mientan más!

7:09

mar